Vivir la Patagonia como un local

Si quieres transformar tu viaje en una verdadera experiencia local, atrévete a salir de los clásicos puntos turísticos y podrás descubrir una perspectiva diferente de la Patagonia chilena.
Aquí te invitamos a probar nuevos sabores, a maravillarte con los pueblos originarios que habitaban esta austral zona, a revelar los secretos mejor guardados de los patagones o simplemente disfrutar de sus mágicos festivales. Esta es otra mirada del sur de Chile.

Viajar como un local es dejar de pensar en cumplir con un checklist, para aventurarse en nuevos recorridos. Es abrirse a la posibilidad de salir de los circuitos turísticos, para tomarle el pulso al destino que visitas. Es compartir con su gente, conocer su historia y la de sus antepasados. Es no conformarse con la clásica foto y buscar rincones a los que muy pocos turistas logran acceder. Es darse el tiempo para realmente disfrutar de las bellezas naturales que ofrece el fin del mundo. 

¿Has pensado en qué recuerdos quieres atesorar de tu viaje a la Patagonia? 

La historia de uno de los lugares más salvajes del mundo es fascinante, desde sus primeros habitantes hasta las tradiciones que persisten hasta hoy. Si te interesa tener una experiencia de viaje más profunda, es un must conocerla. Para esto, una gran alternativa es hacerlo a través de sus pintorescos festivales costumbristas. Estas fiestas son un encuentro con la cultura en su estado más original; música, baile, artesanía y platos únicos que se reúnen en un mismo lugar. Aquí te damos a conocer algunos de nuestros favoritos.  

Asimismo, te recomendamos algunos platos que no puedes dejar de probar. Tanto por sus productos locales -que probablemente no encontrarás en otro lugar del mundo-, como las originales preparaciones.

Y si quieres descubrir lugares que no aparecen en las guías de viaje, te contamos algunos de los secretos mejor guardados de los patagones y excursiones que te harán sentir como un local.

¡Atrévete a conocer la Patagonia chilena desde otro punto de vista!

- 3 cosas que debes saber de la cultura patagona

- 3 formas de descubrir la Patagonia a otro ritmo

 - 5 mejores fiestas costumbristas del sur de Chile

- 4 platos que tienes que probar en la Patagonia chilena

- 4 lugares favoritos de los habitantes de Patagonia 

- 5 excursiones para vivir la Patagonia como un local

 - 5 de los secretos mejor guardados de la Patagonia 

 - 4 cosas que debes comprar en la Patagonia chilena 

3 cosas que debes saber de la cultura patagona


3 cosas que debes saber de la cultura patagona

Si quieres conocer la Patagonia en profundidad, no puedes dejar de lado su cultura e historia. Aprender cómo es y fue la vida en este salvaje rincón del mundo, hará de tu viaje una experiencia insuperable.
¿Cómo sobrevivían sus primeros habitantes? ¿Cómo fue su historia de colonización? ¿Qué tradiciones perduran hasto hoy?

Acá te contamos 3 tips de la cultura patagona que no puedes perder de vista.

1-Pueblos originarios de la Patagonia

Dado el clima salvaje e inhóspito de la Patagonia, sus pueblos originarios despiertan especial interés.

Entre Chiloé y el Cabo de Hornos vivieron varios pueblos nativos con gran riqueza cultural, que desaparecieron progresivamente durante el siglo XIX por el impacto de la civilización occidental.

Los nativos que habitaron esa zona se dividen dependiendo de su ubicación y características en dos grandes grupos.

Entre los archipiélagos y canales que se extienden por este territorio; había pequeños grupos de cazadores-recolectores que se movilizaban en canoas en busca de alimento.

Lo obtenían principalmente gracias a la caza de lobos marinos, aves, peces y mariscos. Su rutina era principalmente acuática y también en medio de una vegetación densa y mucha precipitación.

Entre ellos estaban los chonos, ubicados en las islas que hay entre el archipiélago de Chiloé y la península de Taitao; los kawéskar, entre el Golfo de Penas y el Estrecho de Magallanes; y los yaganes, que se encontraban entre las islas al sur de la Tierra del Fuego.

Por otro lado, en las extensas llanuras entre el Estrecho de Magallanes y Tierra del Fuego vivían indígenas de gran estatura, contextura robusta y grandes pies que se dedicaban básicamente a cazar y recolectar. De hecho, el término patagón viene del tamaño de los pies de estos nativos.

Entre el río Santa Cruz y el estrecho de Magallanes vivían los aónikenk. Vivían de la caza de guanacos y ñandúes. Sin embargo la introducción de las costumbres occidentales alteraron su forma de vida.

Luego, en las planicies de Tierra del Fuego estaban los selknam, a quienes se les reconoce por su riqueza ritual y cultural.

Pese a que estos pueblos tenían una organización social simple, contaban con profundas creencias religiosas y ritos de alta complejidad. Por eso despiertan tanto interés en el mundo occidental.

Los selknam, por ejemplo, tenían una resistencia excepcional al frío. De hecho, no solían ocupar más ropa que pedazos de piel de animal. Además son reconocidos por sus pinturas corporales -resultado de la mezcla de la grasa del guanaco con arcilla- que ocupaban para sus rituales.

Quienes quieran conocer más de la cultura y tradiciones de los pueblos originarios, pueden visitar lugares como el Museo Antropológico Martín Gusinde en Puerto Williams, el Museo Histórico Municipal de Puerto Natales o Museo Salesiano Maggiorino Borgatello en Punta Arenas.

2-Gaucho chileno

Aunque se dice que el gaucho -un jinete hábil dedicado principalmente a la ganadería- es característico de Argentina, Uruguay y Paraguay, también hay registros del gaucho chileno en la Región de Magallanes desde fines del siglo XIX. 

A esa altura del país, la Cordillera de los Andes no representa un gran impedimento para el traspaso de influencias culturales de un país a otro. Por lo tanto, el gaucho chileno es una mezcla entre la cultura indígena de la zona y los gauchos argentinos.

Ciertamente en esta zona austral, la relación era mucho más fuerte y estrecha con el gaucho argentino que con el huaso chileno.

En Chile, el poblamiento de la Patagonia se produjo principalmente con habitantes de Chiloé, quienes estaban más acostumbrados a explotar los recursos. Sin embargo, esta zona posee un potencial ganadero importante y los colones que venían de Chiloé solían trabajar en estancias argentinas. Así adoptaron sus costumbres rurales y desarrollaron condiciones ecuestres.

Si hablamos de objetos característicos de los gauchos, hay que mencionar las botas de cuero, boina, pañuelo al cuello, poncho con diseños geométricos y las boleadoras, un instrumento heredado de los aonikenk. Y de personalidad, se les conoce por tener un trato tosco, pero ser muy hospitalarios.

Otra costumbre de los gauchos es tomar mate, una infusión de hierbas que se sirve en pequeños recipientes con bombilla metálica. Tomarlo es todo un ritual, ya que existen diversas reglas. Por ejemplo, debe existir una sola persona encargada de preparar el mate para un grupo, éste se debe pasar hacia la derecha y si alguien da las gracias, significa que ya no quieres más. 

3-Cordero patagónico

Si hablamos de cultura, la gastronomía forma parte importante de ella. Una preparación clásica en la Patagonia, es el asado de cordero al palo. También es una tradición del sur de Argentina que se integró en las costumbres de la Patagonia chilena. 

En esta zona, las condiciones climáticas y geográficas hacen el cordero tenga una calidad superior, lo que se ve reflejado en su tierna textura y delicioso sabor. 

La cocción suele hacerse al aire libre por varias horas y solo se aliña con sal. Además de ser un sabor característico en la región, el asado de cordero al palo representa una instancia para compartir con la familia y amigos. Todo a paso lento, como suele ser en el sur de Chile. 

 

Conclusión

Estas son sólo algunas de las cosas que debes saber de la cultura patagona. A través de sus sabores, tradiciones y pueblos originarios, se puede reconstruir la historia de uno de los lugares más salvajes del mundo. Si viajas a la Patagonia chilena, además de disfrutar de sus impresionantes paisajes, te recomendamos aprender de su apasionante cultura.

3 formas de descubrir la Patagonia a otro ritmo

 3 formas de descubrir la Patagonia a otro ritmo

 

Hay muchas formas de descubrir la Patagonia chilena. Todo dependerá del tipo de experiencia que estés buscando. ¿Viajas sin apuros? ¿Quieres conocer algo más que los principales puntos turísticos del sur de Chile? ¿Quieres desconectarte?

Si tu respuesta es sí, te contamos que hay alternativas que te permitirán viajar a otro ritmo y descubrir paisajes que parecieran estar reservados sólo para los habitantes de esta zona.

Aquí te contamos 3 formas de recorrer la Patagonia a otro ritmo:

Overland

La Patagonia es extensa, por lo que viajar por tierra puede presentar un gran desafío. Además de trazar la ruta correcta, debes considerar que los desplazamientos entre ciudades pueden tomar horas (incluso días) y muchos de los caminos requieren de un 4x4. El fin del mundo es un lugar para encontrarse con la aventura.

Para quienes quieren recorrer rincones a los que no todos los turistas acceden o simplemente vivir una experiencia más osada y en contacto con la naturaleza, existen alternativas como los viajes overland. 

Se trata de travesías que se hacen en vehículos todoterreno; una especie de casa rodante que no cuenta con grandes lujos, pero sí con las comodidades básicas. El alojamiento se organiza en campings y hostales. Los visitantes no deben encargarse de nada más que disfrutar del destino. De esta manera turistas de todo el mundo recorren la Carretera Austral, Torres del Paine o Tierra del Fuego.

En resumen, es una buena opción para quienes no conocen bien el destino, no tienen tiempo para organizar el viaje, o quieren vivir la Patagonia desde otra perspectiva.

 

Ferry

No hay nada mejor que disfrutar de un destino con calma. Sobre todo si se trata de un lugar como el sur de Chile, donde las bellezas naturales son incontables y el tiempo siempre se hace poco. 

Si piensas viajar por la Patagonia en auto o a pie, el ferry es una gran alternativa para desplazarse cómodamente. La navegación a través de los fiordos y canales entrega una perspectiva completamente distinta de la zona. En el caso de Navimag, el recorrido se hace a bordo de un barco de los años 70, similar al que ocupaba Jacques Cousteau en sus travesías. En él podrás descubrir sectores a los que no es posible acceder por ningún otro medio.Existen dos rutas: la primera lleva desde Puerto Montt a Puerto Chacabuco y la segunda, desde Puerto Montt a Puerto Natales. 

 

Bicicleta o moto

Para los más aventureros, también existe la posibilidad de recorrer la Patagonia chilena en bicicleta o moto. Aunque toma más tiempo y requiere de más esfuerzo físico, es posible, ya que ciertos tramos pueden realizarse en barco.

El documental “Transpatagonia” es una muestra de cómo es un extenso recorrido en bicicleta por la Patagonia. En él, el periodista y aventurero Guilherme Cavallari registra su paso por Patagonia Chilena-Argentina en un trayecto de casi 6 mil kilómetros en seis meses.

Para esta experiencia, te recomendamos trazar la hoja de ruta con anticipación. En ella debes incluir detalles como lugares de descanso, bencineras, tipo de camino e incluso información sobre talleres y lugares donde puedas hacer eventuales reparaciones o comprar repuestos. Como te contamos, las distancias en la Patagonia son considerables, por lo que es posible que no te encuentres con nadie en varios kilómetros. 

Asimismo, prepara tu ropa, la cual debe estar hecha para resistir las inclemencias del clima patagónico...

 

Conclusión

Puedes vivir la Patagonia chilena de muchas formas. Todo dependerá de tu tiempo, presupuesto, compañía y estilo de viaje. Independientemente de cómo conozcas la región, no olvides de hacer esta travesía algo personal y disfrutar del destino a tu manera.

 

5 mejores fiestas costumbristas del sur de Chile

mejores fiestas costumbristas sur de chile

Como te contábamos, las celebraciones locales del sur de Chile destacan la música, los sabores y tradiciones de sus habitantes. Si estás organizando un viaje a la Patagonia chilena, pon atención a estos festivales que pueden hacer de esta experiencia un momento memorable.

Carnaval de Invierno de Punta Arenas

En julio, la región de Magallanes se llena de música, colores y tradiciones gracias al Carnaval de Invierno de Punta Arenas. Esta celebración -organizada por el municipio de Punta Arenas- reúne a distintas comunidades de la zona, para celebrar la cultura y el folclor.  

La fiesta se extiende varios días antes y después del evento principal con distintas actividades, desde musicales a deportivas. Entre ellas, la Expo Indígena, el Iceman Triatlón, conciertos, presentación de reinas y una corrida nocturna. 

Tal vez una de las más mediáticas es el chapuzón que se dan varios valientes en las frías aguas del Estrecho de Magallanes. 

Otra de las actividades más atractivas es el desfile de carros alegóricos (con la temática que entregan año a año los organizadores). Los carros son escoltados por grupos de personas que bailan y animan al público. 

Todo termina con un maravilloso espectáculo de fuegos artificiales. 

Semana Valdiviana

El 9 de febrero, Valdivia (Región de los Ríos), se transforma en toda una fiesta para celebrar la fundación de la ciudad. La Semana Valdiviana congrega a alrededor de 150 mil turistas todos los años. 

La costanera y la Plaza de la República son los principales puntos de celebración. Aquí se concentra el espectáculo de fuegos artificiales, los recitales y la exposición de artesanía. 

Sin lugar a dudas, la última noche de esta semana es la más esperada. Además del espectáculo pirotécnico en el río Calle Calle, se lleva a cabo un desfile de más de 40 embarcaciones con mágicas escenografías hechas por los vecinos, empresas, universidades, etc.

La mejor propuesta recibe un importante premio y el reconocimiento de los espectadores. 

Se dice que esta fiesta se remonta al siglo XVII. Con el pasar de los años, cada vez la producción del evento es mayor. 

 

Festival Internacional de Jineteadas y Folclor de Puerto Ibáñez

Es una de las fiestas costumbristas más importantes de la Patagonia. La Jineteadas Patagónicas se realizan a mediados del mes de enero en la ciudad de Puerto Ingeniero Ibáñez, Región de Aysén.

Por lo general dura un fin de semana y reúne a payadores, folcloristas, artesanía, comida típica y mucho más. Es una excelente instancia para conocer las tradiciones y costumbres de la Patagonia chilena. Asisten alrededor de 5 mil personas. 

Se trata de un evento donde los gauchos pueden demostrar toda su destreza arriba del caballo “reservado”, es decir, difícil de domar. En este encuentro hay varias categorías que varían según la dificultad de los elementos que se utilizan para montar. No sólo participan jinetes chilenos, sino que también de Brasil, Argentina, Uruguay, etc. 

Festival costumbrista chilote

Esta celebración empezó en 1979 y se ha convertido en uno de los mayores eventos gastronómicos del archipiélago de Chiloé y también del sur de Chile. Por lo general, se realiza la tercera semana de febrero y toma lugar en el Parque Municipal de Castro. 

Las últimas ediciones ha congregado a más de 50 mil visitantes y 150 expositores de diversas producciones locales. Los asistentes podrán encontrar degustaciones de platos típicos, artesanía de la zona, músicos locales y humoristas. Es ideal para lo niños porque cuenta con una granja y bosque educativo. 

Además, en forma paralela, se realiza la Feria de la Biodiversidad donde se exponen productos de elaboración chilota. 

Encuentro Costumbrista de Cochrane

La segunda semana de febrero en el Parque Costumbrista de Cochrane, se realiza una de las fiestas más antiguas de Aysén. Dura tres días y parte con un gran asado de cordero al palo que es compartido entre los visitantes. 

Este encuentro cuenta con ramadas, música en vivo, competencias gastronómicas, exposición de artesanía (trabajos en cuero, lana, madera, etc), desfiles, demostraciones de cómo se esquila una oveja (y todo el proceso que pasa la lana), jineteadas, muestra de ordeña, juegos típicos y mucho más.

Asimismo, se realiza un romería para homenajear a los primeros habitantes que poblaron la zona.

Conclusión

Estas son solo algunas de las mejores fiestas costumbristas del sur de Chile sumergirse en las costumbres y tradiciones de la zona. En este ambiente de fiesta, puedes conocer sus comidas, música y cultura.

Cuando planifiques tu viaje al sur de Chile, te recomendamos revisar las fechas de estos eventos para que puedas vivir una experiencia única.

4 platos que tienes que probar en la Patagonia chilena

4 platos que tienes que probar en la Patagonia chilena

Esta austral zona, además de destacar por la belleza de sus paisajes naturales, también cautiva con su exquisita gastronomía. 

Aquí podrás probar platos únicos que tienen preparaciones muy parecidas a un ritual.

Estos son los 4 platos que tienes que probar en la Patagonia chilena.  
¿Listo para los sabores del fin del mundo? 

Centolla magallánica

Si vas a llegar al fin del mundo, mereces darte un gustito. La centolla magallánica es considerada un lujo, por su inigualable sabor y, a veces, elevado precio. Sin embargo, en la región de Magallanes es mucho más accesible que en otros lugares.

Se trata de uno de los mejores crustáceos chilenos y con toda propiedad puede hacerle competencia a la langosta.Tiene un período de veda que se extiende, por lo general, entre diciembre y julio. Por eso, para encontrarla hay que tener mucha suerte.

¿Donde probarla? 

El diario El Pulso recomienda la centolla con salsa de kiwi del restaurante Afrigonia, en Puerto Natales, y una variación son los ravioles de centolla del Hotel Tierra Patagonia, en la misma ciudad.

Puedes acompañarla con un exquisito pisco sour de calafate, un fruto que crece en la Patagonia.

 

Cordero al palo

Como te contamos en el blog “3 cosas que debes saber de la cultura patagona”, el asado de cordero al palo es toda una experiencia. Su cocción se hace al aire libre y toma al menos un par de horas. Mientras se prepara, los comensales pueden disfrutar de un buen vino y de la espectaculares vistas. También puede cocinarse en horno de leña, con la misma paciencia. 

Debido a la geografía y clima del sur de Chile, la carne de cordero tiene muy buena calidad; textura tierna y delicioso sabor. Justamente la ganadería ha sido una de las principales actividades económicas de la región de Magallanes.Puedes probarlo en la Parrilla de Don Jorge, acompañado de unas papas al merkén, o en la Estancia Puerto Consuelo, donde se puede disfrutar de todo el proceso. Ambas opciones en Puerto Natales.

 

Curanto

Otro plato del que hablamos previamente es el curanto. Este plato es clásico de Chiloé y uno de los más representativos de la gastronomía chilena. 

Puede prepararse en hoyo u olla. La primera opción tiene una mística especial porque, al igual que el asado de cordero, toma bastante tiempo. Para partir hay que cavar un hoyo en la tierra de 1 metro aproximadamente, luego se cubre el fondo con piedras y se entremezclan leña y carbón. Así se calientan las piedras que cocinan los ingredientes: mariscos, longanizas, costillar, pollo, papas, especias, etc.

Algunas alternativas para probarlo son El Mesón Chilote, en Ancud, o las cocinerías de Dalcahue.

Guanaco

Como asegura revista Paula, hace un par de años el guanaco es un boom en la cocina del sur de Chile. Esta fue una tendencia incorporada de la comida mapuche. El lugar que concentra mayor población de estos camélidos es Tierra del Fuego. Éste es el único lugar donde no posee depredador natural. Su caza está regulada y permitida solo en invierno, por personal autorizado. 

Ahora, ¿por qué es tan cotizado en la gastronomía local? Por lo magra y sabrosa de su carne. En Hostería Las Lengas, en la localidad de Lago Blanco, lo preparan asada, como goulash o escalopa. También en brochetas marinadas en hierbas y ruibarbo, un pariente del apio más ácido y rosado.

Conclusión

Gran parte de un viaje es descubrir su gastronomía. Estas 4 preparaciones serán toda una experiencia para tu paladar. Atrévete a probar sus sabores y conocer sus procesos. Y si te gustan, no te quedará más que volver.

 

4 lugares favoritos de los habitantes de Patagonia

4 lugares favoritos de los habitantes de Patagonia

Hay lugares desconocidos de la Patagonia que solo los lugareños suelen disfrutar. El slow travel permite viajar a paso lento, descubriendo rincones mágicos que pocos turistas visitan. 
Si estás planificando un viaje por el sur de Chile, revisa estos cuatro lugares favoritos de los habitantes de Patagonia.

Lago Blanco

Timaukel, en Tierra del Fuego, es una de las comunas menos habitadas de Chile. Aquí se encuentra el Lago Blanco,  el segundo más grande de la región, que se extiende por 36 kilómetros de largo y 18 de ancho. Sus aguas son reconocidas mundialmente como un paraíso para la pesca deportiva (o pesca con mosca). Aquí se pueden encontrar diversos tipos de truchas, como las arcoíris y las marrón. El lago está rodeado de bosques magallánicos que nacen en los pies de la cordillera fueguina. 

Cerca en el sector de La Estancia Los Tres Hermanos se pueden avistar colonias de pingüinos rey. En este caprichoso clima también viven diversos tipos de aves, guanacos, caballos salvajes, y en los diques de los ríos, castores. 

En este rincón del mundo reina la paz. Los pocos habitantes de la zona se dedican a la ganadería ovina y el turismo ha crecido un poco los últimos años, debido a los impresionantes paisajes casi inexplorados que aquí se encuentran. 

Parque del Estrecho de Magallanes

A una hora de Punta Arenas, se encuentra el Parque Estrecho de Magallanes. Se trata de un recorrido de alrededor de 4 kilómetros en los que se pueden descubrir distintos atractivos como el Fuerte Bulnes (Monumento Histórico Nacional) una recreación del primer asentamiento chileno en este territorio, en 1983; el Sendero Bosque del Viento, una ruta peatonal de 300 metros que donde se puede mirar el paso de los barcos, aves y ballenas; o el Sendero de la Costa, otro sendero peatonal un poco más extenso que recorre los bosques y roqueríos que rodean el fuerte y que cuenta con varios miradores.

También hay un centro que ofrece una muestra interpretativa y multimedial sobre la historia natural y humana del Estrecho de Magallanes. Desde su terraza hay una increíble vista de Puerto de Hambre. 

Faro de San Isidro

Está 75 kilómetros al sur de la ciudad de Punta Arenas. En las costas de la Península de Brunswick, el Cabo San Isidro está envuelto por montañas y bosques subantárticos de coihues, canelos, siempre verdes, turberas, humedales, zonas alpinas y también de río, lagos y glaciares. En su recorrido es muy común ver delfines y distintas aves marinas.La historia de este faro se remonta a 1904 y fue levantado en este lugar, para orientar la navegación hacia Punta Arenas. A mediados del siglo XIX, el Estrecho se transformó en pieza clave para el comercio. Como aumentó el tráfico de embarcaciones y se produjeron más accidente, surgieron necesidades de señalización. Actualmente está restaurado y es un hospedaje.

Muy cerca está Bahía El Águila, un lugar ideal para hacer camping (queda protegido del viento) y para hacer kayak.

Para los más aventureros, al sur se encuentra el Cabo Froward, donde se está “Cruz de los Mares”, que marca el último punto del continente americano.

Para llegar, hay que pasar el Fuerte Bulnes y San Juan, un hermoso rincón donde los puntarenses suelen hacer picnic durante el día o  recolectar calafate durante el mes de marzo.

 

Laguna Azul (noreste de Torres del Paine)

Torres del Paine es un destino clásico dentro de Chile y nada menos que la octava maravilla del mundo. Es por esto que turistas viajan desde todas partes del mundo a conocerlo. 

Pero para quienes no quieren encontrarse con grandes afluencias de público y prefieren disfrutar de la Patagonia de manera más íntima, la parte norte de la Laguna Azul es el lugar ideal para ellos. 

Desde aquí pueden verse los famosos cuernos nevados desde otra perspectiva y vivir experiencias como ver a los famosos caballos salvajes (o baguales) que viven al alero de la Sierra Masle. En este recorrido podrán ver montañas, valles, esteros, lagunas, humedales sin toparse con más turistas. Como el sendero no está delimitado es necesario ir con guía.

5 excursiones para vivir la Patagonia como un local

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Éste es de esos lugares únicos en los que querrás empaparte de las costumbres y tradiciones de sus habitantes. Tómate tu tiempo para recorrerla y atrévete con nuevas rutas.

Si ya has visitado los principales atractivos de la Patagonia o quieres descubrir rincones y experiencias que no aparecen en las clásicas guías de viaje, las siguientes excursiones pueden hacer de tu viaje algo memorable. 

1-Caminata hacia Laguna Verde

Indiscutidamente, en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena, uno de los principales atractivos son las Torres del Paine. Sus cuernos se llevan la atención de turistas del todo el mundo, pero esta zona también cuenta con otros mágicos lugares y excursiones. 

Una de ellas es la caminata hacia Laguna Verde. Este circuito tiene baja dificultad y se hace a través de una de la Cordillera Paine. Este sector, la base de la Sierra del Toro, está rodeado de lagos y valles.

El recorrido se inicia en el sector de Estancia Lazo, con espectaculares vistas del Lago Sarmiento y sus aguas intensamente azules. Lo interesante es que desde aquí podrás ver la cara sur de la Cordillera del Paine y, al seguir la caminata hacia el sector suroeste, se puede apreciar la maravillosa Laguna Verde, además de las lagunas Onda y Calafate. 

El suroeste del Parque Torres del Paine se caracteriza por sus lagos y ríos de aguas 
prístinas. El trekking es bastante suave y todo el tour toma un día completo.

2-Cabalgata Cerro Dorotea

Esta montaña es una frontera natural entre Chile y Argentina. Las cabalgatas hacia su cumbre suelen ser una experiencia muy diferente. Desde lo más alto se puede observar con calma toda la zona, en especial la ciudad de Puerto Natales, el Golfo Almirante Montt y el Fiordo Última Esperanza.

Esta excursión toma alrededor de 3 horas y es dirigida por un gaucho (o baqueano) que conduce a los exploradores por bosques y praderas. 

Si lo que buscas es una experiencia local, esta es una perfecta aproximación a la vida de estos jinetes del fin del mundo. Los caballos magallánicos están acostumbrados al clima hostil de la Patagonia y los obstáculos que puedas encontrar en el camino. Gracias a eso, esta excursión es ideal para toda la familia. 

3-Sendero Religioso

En los alrededores de Coyhaique hay otros lugares interesantes aparte de las Capillas de Mármol. Si quieres conocer cómo los locales viven sus tradiciones, el Sendero Religioso puede ser una excelente muestra. 

El recorrido parte en dirección oeste a través de la ruta 240, con el río Simpson a un lado  (paraíso para quienes practican la pesca con mosca). En el camino podrás ver praderas que se pierden en el horizonte, hasta llegar a un pasadizo entre cerros y montañas rodeados de pequeños bosques de lengas y cipreses.

La primera parada es a los 30 kilómetros aproximadamente. Ahí se encuentra el Santuario de San Sebastián, donde muchos fieles van a agradecer o pedir favores al santo. Se trata de un lugar tranquilo y acogedor al que no llegan muchos turistas.

En no más de 2 kilómetros en dirección hacia Puerto Aysén, hay un segundo lugar religioso: la Gruta de la Virgen María. A su lado está la Cascada de la Virgen, un hermoso salto de agua que, por la fuerza con que cae,  forma una especie de corona. Aquí, cada 11 de febrero, los fieles se reúnen en este lugar para rendir culto a la virgen con ofrendas y ceremonias. 

 

4-Ascenso del Volcán Calbuco 

Puerto Montt no es sólo una ciudad de paso para tomar el ferry hacia Puerto Natales, también cuenta con diversos atractivos turísticos en sus alrededores. Por ejemplo, para los que aman la montaña, la ascensión al volcán Calbuco puede ser un excelente desafío.

Mucho menos tradicional que el Volcán Osorno, este trekking tiene una dificultad media y requiere de ciertos conocimientos técnicos. En el camino, se puede apreciar el bosque siempreverde y las consecuencias de las últimas erupciones.

La cumbre se encuentra a más de 2000 metros de altura. Desde arriba, hay una vista insuperable del Lago Llanquihue, los valles aledaños y los volcanes Puntiagudo, Tronador y Osorno.

A los 1.100 metros hay un refugio de la Conaf gratuito. Regularmente las salidas se hacen entre octubre y marzo.

5-Navegación Fiordo de las Montañas

Esta es una excursión alternativa para hacer desde Puerto Natales y que probablemente muy pocos turistas conocen en una primera instancia. Pocos operadores turísticos la ofrecen y es ideal para lo más aventureros. El itinerario es exigente, ya que son varias excursiones y navegaciones en una.

Todo parte en una barcaza que cruza desde Puerto Natales a la península Antonio Varas, por el Canal Señoret. Desde ahí en adelante el recorrido es toda una aventura y se hace en pequeñas embarcaciones, auto y trekking.

Algunos de los puntos que se pueden apreciar son el Fiordo Resi, la Reserva Alacalufes, el Fiordo de las Montañas, la Laguna Acantilados, los glaciares Bernal, Hermann, Kiara, Alsina y Paredes de la Cordillera Sarmiento.

Esta excursión se puede hacer en 2 o 3 días y una de las cosas más interesantes es que los turistas alojan en un refugio flotante. 

Conclusión

Si quieres vivir la Patagonia como un local debes buscar experiencias que salgan de lo turístico. Para esto, el slow travel es la forma perfecta para descubrir verdaderamente un destino y acercarse a sus habitantes. 

En las excursiones que te sugerimos podrás conocer algunas de la tradiciones y costumbres de los lugareños, además de acceder a lugares que el común de los turistas jamás visitará.

 

5 de los secretos mejor guardados de la Patagonia

5 de los secretos mejor guardados de la Patagonia 

En un viaje, los lugareños siempre serán la mejor fuente de datos y en la Patagonia esto no es la excepción. Los turistas suelen moverse en torno a los principales atractivos turísticos y, muchas veces, pasan por alto lugares muy interesantes y desconocidos. Si te gusta conocer el lado B de los destinos que visitas y no quieres hacer lo que todos los turistas hacen, acá te dejamos algunos de los secretos mejores guardados de la Patagonia

 

1-Monte Verde

Este es un lugar que probablemente no encontrarás en las guías turísticas porque aún no cuenta con suficiente infraestructura para recibir visitantes. Es más, su descubridor asegura que muy poca gente sabe de este sitio después de 40 años.

Monte Verde se encuentra aproximadamente a 30 kilómetros al sudoeste de Puerto Montt. Se dice que es el sitio arqueológico más antiguo de América, ya que aquí se encontraron objetos a los que se le estima más de 14 mil años de antigüedad. 

El descubrimiento lo hizo el arqueólogo y antropólogo estadounidense Tom Dillehay junto a un grupo de científicos chilenos de la Universidad Austral en 1977. 

En el lugar encontraron objetos de caza, elementos arquitectónicos, huesos de animales, fogones y hasta una pisada humana.

Sin embargo, este hallazgo ha despertado gran polémica debido a que diversos investigadores han cuestionado su validez. Lo controversial de este descubrimiento es que tiraría por la borda la teoría sobre el poblamiento de América.

Antes de que esto pasara existía un consenso en la comunidad científica sobre los primeros pobladores del continente. Los clovis eran habitantes de Nuevo México (Estados Unidos), cuyos orígenes se remontan a 11.200 años atrás.El lugar es administrado por un particular y para visitas es mejor coordinar previamente.

2-Laguna Sofía

¿Dónde veranean los natalinos? Probablemente quienes viven en Puerto Natales no quieren que los turistas se enteren donde van a buscar un poco de calma en temporada alta.Laguna Sofía está 30 kilómetros al norte de la ciudad, entre la sierra Señoret y Cerro Benítez. Aquí suelen ir a practicar deportes acuáticos, pescar o sumergirse en las frías aguas turquesa de la laguna. Y cuando llega el invierno, se escapan a esta zona a hacer trekking por el cerro para tener las mejores vistas del lugar y de los cóndores que habitan ahí.

 

3-Curanto en hoyo

Uno de los platos clásicos de Chiloé es el curanto en hoyo. Se trata de una preparación curiosa: los encargados hacen un hoyo en la tierra y utilizan piedras calientes para cocinar los alimentos al vapor. Entre ellos, mariscos, carnes, vegetales y derivados de la papa como el milcao y el chapalele. 

La técnica toma bastante tiempo. De hecho, es casi un ritual. Y como no es una preparación fácil -que debe hacerse al aire libre-, solo hay ciertos lugares donde ofrecen este plato. Es más, para hacerlo se necesita un grupo de alrededor de 5 personas. Por eso, en la mayoría de los restaurantes suelen cocinarlo en olla, una técnica mucho más simple. 

Pero para un exquisito curanto, hay lugares como las cocinerías de Dalcahue (25 kilómetros al norte de Castro). Se trata de una construcción con forma de barco que está suspendida sobre el mar. En su interior aloja a 20 puestos de gastronomía que ofrecen platos abundantes. 

Muy cerca está la feria artesanal donde se pueden conseguir miniaturas de las casas con tejuelas o miniaturas de las iglesias patrimoniales. 

4-Centro de Arte Molino Machmar

En Puerto Varas existen pocos lugares que se dediquen a difundir la cultura local. El Centro de Arte Molino Machmar (CAMM), además de ser uno de los pocos espacios para el arte, también destaca por su arquitectura. Se trata de un antiguo molino que fue restaurado para alojar a este centro cultural. 

Aquí se presentan músicos locales, exposiciones de artistas de la zona, todo tipo de talleres y también cuenta con la única sala de cine de la ciudad, donde se exhiben películas y documentales. 

5-Petroglifos

En la ruta que une Puerto Guadal y Chile Chico existe un lugar donde hay impresionantes petroglifos. Como el lugar no forma parte de ningún tour ni está señalizado, deberás recurrir a la ayuda de algún lugareño para localizarlo. 

Están ubicados a escasos 10 metros del camino, en una cueva que supuestamente albergaba a los habitantes de antaño.El camino se caracteriza por sus pronunciadas curvas y acantilados, pero también ofrece  hermosas vistas del Lago General Carrera.

 

Conclusión

Si no eres de los que se conforma con las clásicas alternativas que ofrecen las agencias de viaje, estos son algunos de los secretos mejor guardados de la Patagonia. En cada destino que estés, encárgate de conversar con los locales y preguntarles los mejores datos. Todas las ciudades de la Patagonia reservan secretos para sus habitantes. Probablemente tú puedes ser uno de los pocos turistas en descubrirlos.

Esta es una invitación para que disfrutes tu viaje desde otra perspectiva y que lo transformes en una experiencia memorable. No te arrepentirás. 

 

4 cosas que debes comprar en la Patagonia chilena

4 cosas que debes comprar en la Patagonia chilena

No se trata de clásicos souvenirs, sino de productos realmente originales que te recordarán un viaje memorable. Olvídate de los clásicos imanes, llaveros o poleras con el nombre de la ciudad que visitaste. Estas son algunas de las cosas que debes comprar en la Patagonia chilena, todas parte del día a día de los patagones y que rescatan a algunos de sus materias nativas.


Los artículos hechos a mano o aquellos que son elaborados con materias primas de la zona tienen un valor especial. Además de apoyar la producción local, te encontrarás con piezas que sólo hay en la Patagonia.

Tu viaje al fin del mundo debe tener recuerdos únicos, incluidas las cosas que llevas de vuelta a casa. Si piensas volver con más equipaje, que sea con souvenirs auténticos y especiales.Aquí te recomendamos 4 cosas que debes comprar en la Patagonia chilena:

Gorro de lana chilote

Es un accesorio tradicional que hasta se ganó un espacio en folclor nacional. Una de las postales clásicas de Chiloé es la del típico pescador entrando al mar con su gorro de lana.

Por lo general, estos gorros están elaborados a mano por tejedoras chilotas en lana de oveja. Son la prenda ideal para protegerse del frío y el viento típico de la zona.

Puedes encontrarlos en varios de los mercados o ferias que están esparcidos en el archipiélago de Chiloé. Por ejemplo, la Feria Artesanal de Dalcahue, el Mercado Artesanal Los Palafitos, Feria Artesanal Llauquil de Quellón, etc.

 

Lanas de Natales

Si te gusta la lana de oveja y quieres llevar algo un poco más sofisticado, en la tienda Le Mouton Vert en Puerto Natales puedes encontrar diseños exclusivos, hechos con un proceso completamente natural y que busca generar conciencia con el trabajo no industrializado. Se ubica en Avenida Pedro Montt 16, Galpón Patagonia.

También en Puerto Natales, está Krea-Noe, un lugar donde puedes hacer tus propias creaciones. Aquí puedes tomar una clase de telar para crear tu propia bufanda. también hay pieceras, ponchos, ruanas, chalecos y muchas prendas hechas en lana.

 

Cuero de salmón

El salmón no es sólo un producto cotizado para realizar exquisitas preparaciones culinarias, actualmente tiene un segundo uso. La piel que es desechada por la mayoría de las plantas salmonicultoras es utilizada para dar forma a exclusivas carteras, zapatillas, billeteras y diversos accesorios. 

Si quieres algunos de estos productos, puedes encontrarlo en la Feria Artesanal de Melipulli (al frente del terminal de buses de Puerto Montt), las ferias costumbristas que se hacen durante el verano en Chiloé, en las ferias artesanales de Angelmó y de la Plaza de Armas de Coyhaique.

Como vimos en el blog “3 cosas que debes saber de la cultura patagona”, uno de los pueblos originarios que pobló esta austral zona fueron los selknam. Este grupo se caracterizaba por las llamativas pinturas corporales que lograban hacer con grasa de animal.

 

Figuritas selknam

En uno de los locales del Pueblo Artesanal de Puerto Natales se encuentran piezas réplicas de pequeños ñandúes con piel de conejo y figuras de hombres selknam talladas en madera. Su creadora es María Guenchugaray y produce piezas rústicas. 

Asimismo, la artesana de raíces huilliches Rosa Paillacar, cautivada por los rituales de los selknam, empezó a tallar hermosas figuras de este pueblo. Las vende en Rodemil Bitterlich Nº 1650.

 

Conclusión

La experiencia que vivirás en la Patagonia será única. Asegúrate que el recuerdo que compres sea algo especial, a lo que puedas dar buen uso y que no encuentres en otra parte del mundo.

Así estarás apoyando el desarrollo local y tendrás un producto con historia. Sin embargo, te recomendamos tener en consideración las restricciones que tiene tu país para dejar entrar ciertos productos de origen vegetal o animal.